La empresaria fue la reina de la gala del MET enfundada en el famoso vestido del 'Happy Birthday Mr President' de Marilyn Monroe. Tuvo que adelgazar siete kilos en tres semana para poder meterse en él.
Kim Kardashian (41) se convirtió en la reina de la Gala del MET, celebrada el pasado lunes en Nueva York, con un vestido nada extravagante pero extremadamente icónico: el que llevó Marilyn Monroe en 1962 para cantarle el Happy Birthday Mr. President a John F. Kennedy. Hasta se decoloró el pelo como la protagonista de Los caballeros la prefieren rubias. Enfundarse en el famoso vestido no ha sido fácil para la curvilínea Kim, que ha tenido que adelgazar siete kilos en un tiempo récord de tres semanas.
Kim subió las escaleras del MET del brazo de Pete Davidson, su nueva pareja. Todas las miras se posaron sobre ella y todo el mundo se preguntó dónde habían ido a parar las prominentes caderas de la empresaria e influencer. Ella misma ha confesado en su cuenta de Instagram que el vestido no se podía modificar y que tenía que perder unos kilos para poder meterse en él. "Me siento muy honrada de llevar el icónico vestido que llevó Marilyn Monroe en 1962 para cantar el cumpleaños feliz al presidente John F. Kennedy. Es un impresionante vestido ceñido adornado con más de 6.000 cristales cosidos a mano por Jean Louis", confiesa Kim en su Instagram.
Para convertirse en Marilyn tuvo que hacer una draconiana dieta durante tres semanas y adelgazar siete kilos. La pérdida de volumen, además, tiene un truco: el traje sauna que Kim suele utilizar en sus entrenamientos, un complemento que los especialistas no suelen recomendar porque provoca pérdida de agua y no es nada saludable. Realizado en plástico, PVC u otro material, los trajes sauna supuestamente promueven la pérdida de peso mediante el efecto sauna.
"Me lo probé [el vestido] y no me quedaba bien. Entonces dije, 'dame tres semanas'. Tuve que perder más de 7 kilos para hoy", admite Kardashian frente a las cámaras.
Para perder los siete kilos en menos de un mes Kim se ha sometido a una dieta extrema, en la que ha eliminado por completo los carbohidratos y azúcares de su alimentación y solo comía verduras y proteínas lo más limpias posibles. Los carbohidratos son necesarios para tener energía y forman parte de una dieta equilibrada. Además,Kim cambió el tipo entrenamiento y estas tres semanas solo se ha enfocado en hacer cardio en la cinta de correr.
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