Málaga se consolida como un destino internacional para vivir y para trabajar | Diario Sur

2023-01-12 15:40:05 By : Mr. Tend Manager

Los ponentes en el foro inmobiliario, junto al alcalde de Málaga y al director de SUR. / francis silva

La construcción en la ciudad de Málaga vive un momento dorado, a pesar de la inestabilidad económica, la crisis de suministros y la inflación. La capital se ha consolidado como un destino internacional para vivir y para trabajar, aunque el sector inmobiliario advierte de la necesidad de superar carencias históricas para mantener el ritmo y seguir creciendo. Como primer escollo, inversores y profesionales claman por agilizar los trámites ambientales para poner nuevos suelos a disposición de los promotores y construir viviendas para los clientes locales de clase media. Así como por mejorar algunas infraestructuras viarias.

Así se puso de relieve ayer en el foro 'Málaga, un lugar para vivir e invertir', organizado por SUR con la colaboración de Stoneweg, Sierra Blanca States, Urbania y Savills. Los expertos también coinciden en reivindicar una mayor difusión del destino Málaga; y en buscar la calidad y el lujo, pero sin descuidar las necesidades de vivienda de los malagueños. Al encuentro, celebrado en el hotel Vincci Posada del Patio y que fue inaugurado por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; y el director de SUR, Manuel Castillo, asistieron los principales representantes del sector inmobiliario de Málaga, en medio de un clima de fuerte expectación ante el resultado del concurso de las torres de Repsol.

La mesa, moderada por el periodista de SUR Jesús Hinojosa, contó con la participación del concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López; el director del área residencial y suelo de Urbania, además de presidente del Grupo Promotores de la Asociación de Constructores y Promotores (ACP), Ignacio Peinado; el presidente de Sierra Blanca Estates, Pedro Rodríguez Castillo; el responsable de gestión de activos del fondo de inversión Stoneweg, Juan Galbis; el director para Andalucía de Savills, José Félix Pérez-Peña y el arquitecto socio del estudio HCP, Alejandro Pérez Martínez.

El edil destacó durante su intervención que la ciudad tiene un futuro prometedor para vivir y trabajar, y subrayó que si ha llegado hasta este punto es fruto de la colaboración con el sector privado, que es el que ha pedido que haya oficinas en el Centro y que se reserve suelo para este uso en Repsol. «Málaga es gracias al esfuerzo de todos». En cuanto a la promoción exterior, se refirió a la Expo 27, que «forma parte de la visión larga del alcalde»; y el apoyo en otros eventos internacionales «para subir de nivel».

Aunque admitió que hay que buscar fórmulas para desarrollar nuevos espacios, también abogó por una «vertebración real del área metropolitana», porque tiene «un tamaño ideal, donde se cumple la norma de la ciudad de 15 minutos, y una de las mayores calidades de vida». Sobre la demanda de infraestructuras, Raúl López esgrimió las mejoras en materia de inundabilidad, con 11 suelos logísticos en desarrollo para atender «una demanda histórica de los empresarios de grandes naves». En cuanto a la agilización de los trámites, el titular de urbanismo se mostró partidario de que la administración funcione mediante silencio administrativo positivo: «Tenemos que quitarnos la chaqueta de fiscalizar los proyectos, y por eso fuimos los primeros en adoptar la declaración responsable en las licencias de obras».

El presidente de Sierra Blanca Estates, responsable de uno de los principables proyectos de Torre del Río (zona de la Térmica), confirma que Málaga es «el lugar ideal para vivir e invertir, y ahora el reto es llevar este mensaje a otras ciudades y países; tiene una magnífica reputación internacional y es un destino global, no solo vacacional, tambien cultural y residencial, y un centro neurálgico de nuevas tecnologías, por eso los promotores apuestan por la ciudad». De hecho, su compañía tiene en cartera nuevas inversiones para viviendas y oficinas.

A su juicio, en Málaga existe un nuevo perfil joven de cliente inversor, ya que muchas compañías internacionales extranjeras vienen a instalarse. Muchos empresarios europeos no sólo se establecen aquí, sino que vienen a invertir. «Tiene todos los ingredientes para convertirse en un gran destino residencial, gracias no solo al sol y la playa, sino a su calidad de vida, la cultura, la gastronomía y las infraestructuras, en especial el AVE y el Aeropuerto internacional». De ahí que, insiste, «hay que saber vender el producto en el mundo».

Juan Galbis, de Stoneweg, coincide en que la capital malagueña se ha convertido en uno de los mejores sitios para vivir, trabajar y tener a la familia, con proyección internacional. «Las empresas tecnológicas necesitan nuevos espacios de trabajo y vivienda de calidad en alquiler para los profesionales que están llegando»; incluso apunta que muchos de los inversores de su compañía se trasladaron a vivir a Málaga durante la pandemia. En este punto, destaca el «enorme interés» que tienen por los suelos de Repsol, pues suponen la oportunidad de crear espacios para vivir y trabajar de calidad, con altos requisitos de sostenibilidad e integrados en un parque. «La experiencia Málaga hay que vivirla y se vende muy bien, cuando los inversores llegan con facilidad, rentabilidad y seguridad jurídica; esa es la mejor publicidad».

Ignacio Peinado, directivo de Urbania y presidente de los promotores en la ACP fue el encargado de hacer las advertencias más serias sobre las consecuencias de la larga burocracia. «El vehículo Málaga corre el riesgo de quedarse sin gasolina, por los obstáculos para poner en marcha nuevos proyectos, y hay sectores en Campanillas donde no hay codazos para entrar», «Hay que crear nuevos destinos en la ciudad y acortar las trabas burocráticas de las figuras de planeamiento de los suelos», sobre todo los trámites ambientales, que ahora no tienen certidumbre en cuanto a los plazos. «Si hubiera certeza en el tiempo de los trámites no se cabría de inversores en Málaga, pero los trámites llevan décadas y eso genera inseguridad jurídica». Según sus cálculos, la ciudad necesita sacar adelante 50.000 viviendas, y no se trata de que la ley sea más laxa, sino más ágil.

«Málaga antes no contaba en las quinielas, es un trabajo que viene de muy lejos, antes se temía que los concursos se quedaran desiertos, y hoy hay cinco empresas con arquitectos mundiales compitiendo por Repsol. Hay que saber venderla mejor, falta información», asegura José Félix Pérez-Peña, de Savills, y admite que la capital de la Costa del Sol ya es una alternativa para invertir a Madrid y Barcelona. También, el hecho de que se vean levantarse los edificios de Torre del Río, Repsol y Martiricos hará que los inversores vean que la ciudad «va en serio».

Con todo, no pierde de vista que el alto precio de la vivienda se debe a la escasez de la oferta y al aumento de la demanda, «mucha gente quiere venir a vivir», lo que ha hecho que el precio acumule un 40% desde 2018. «Cada vez los clientes son más de alta capacidad, el Centro ya casi todo es propiedad de inversores, es fundamental construir para alquilar para los jóvenes y crear nuevas zonas de desarrollo». Sobre la promoción, pone como ejemplo el conjunto del Puerto, con Google, los megayates y el proyecto de oficinas Monday (de Urbania). «El que venga le hará una foto, la enviará y atraerá más atracción».

Alejandro Pérez Martínez, arquitecto socio de HCP, que ha sido el encargado del diseño del parque en los terrenos de Repsol, coincide en advertir que la ciudad se está quedando sin suelo y necesita pensar hacia donde va a crecer en el futuro, para lo que esgrime el soporte de la ley autonómica (Lista). «Hay que pensar en un nuevo planeamiento con cobertura legal para una transformación real, que va más rápido que la administrativa». A su juicio, «Málaga ha crecido en cantidad y ahora le toca hacerlo en calidad», y pone como ejemplo el concurso en Repsol y el plan Málaga Litoral, «donde arquitectos de renombre tienen interés en entrar». También aboga por un plan especial de infraestructuras, para mejorar las comunicaciones con los nuevos suelos en desarrollo.